Kingsman, o la insorportable levedad de Colin



Pensé que Kingsman era un producto más serio, un spin off de James Bond pero está a medio camino de la seriedad del agente 007 y del cachondeo de Austin Powers, sin embargo, esta dosis de hilaridad no provocan el más mínimo cambio en las facciones de su protagonista, Colin Firth, a quien le debieron decir en la escuela de interpretación que lo mejor era no mover ni un músculo.

Y es que así es Colin Firth, un actor con papeles atormentados que despacha con un hieratismo que le va muy bien. Mueve algo el rostro porque tiene que abrir la boca para hablar porque si tuviese dotes de ventriloquía ni eso haría. Sus personajes parecen continuaciones de películas anteriores variando la situaciones como por ejemplo en El discurso del Rey (2010), o en Un Largo Viaje (2013)

Estamos ante una película entretenida, de espías con apariencia clásica y conservadora pero muy sofisticados en cuanto a los cachivaches se refiere. Mucha acción y personajes reconocibles que aportan cierta estabilidad a una historia hecha para entretener, sin muchas aspiraciones. En ocasiones es un pelín sangrienta y tiene algunas escenas originales en la forma de mostrarnos las peleas que se suceden: me llamaron la atención algunos “selfies” que simulan ser hechos desde las armas empuñadas.
Respecto a los personajes, además de Colin Firth, tenemos a Samuel L. Jackson que debería vigilar la cantidad de papeles de macarra del Bronx que le ofertan,  al correcto Mark Strong que llena la pantalla con su seriedad alopécica y a Michael Caine, muy, muy, muy mayor.  Hay más personajes, por supuesto pero quiero destacar a la secuaz Gacelle interpetada por Sofia Boutella. Ese personaje me recordó al corredor atleta sudafricano caído en desgracia Oscar Pistorius más conocido como “Blade Runner” por sus cuchillas en los pies, como Gacelle.

Por cierto, Sofia Boutella es más conocida por sus bailes acrobáticos en anuncios de Nike y por haber participado en vídeos de Madonna y de Michael Jackson entre otros.

En fin, Kingsman, una peli que cumple su papel, aunque a mí tanto “britanismo” me aburre. No todos tenemos porque adorar a her majesty Elizabet II e idolatrar el estilo y modales de los “gentlemen” ingleses. 

La última vez que estuve en Londres todo el mundo te decía “excuse me, excuse me” a la mínima de cambio, incluso en una ocasión coincidió mi mirada con la de un desconocido y también me dijo “excuse me”. ¡Todo era considerado motivo de disculpa!. Eso sí, tener cadáveres amontonados en patios traseros o bebes en frigoríficos lo deben de considerar más admisible, como indicaban varias noticias locales por aquel entonces.

Ficha de la película

Título original: Kingsman. The Secret Service aka
Año: 2015
Duración: 29 min.
País: Reino Unido
Director: Matthew Vaughn
Reparto: Colin Firth, Taron Egerton, Samuel L. Jackson, Mark Strong, Michael Caine, Sofia Boutella, Sophie Cookson, Mark Hamill, Jack Davenport, Tom Prior, Neve Gachev, Alisha Heng
Sinopsis: Un veterano agente secreto inglés (Colin Firth) debe entrenar a un joven sin refinar (Taron Egerton), pero que promete convertirse en un competitivo agente gracias a un ultra-programa de entrenamiento, al mismo tiempo que una amenaza global emerge procedente de un genio retorcido. Adaptación del cómic de Mark Millar y Dave Gibbons. (Fuente: FILMAFFINITY)